Tratando de olvidar un pasado encadenado a mi mente mis fuerzas se van,
luchando con un fantasma se rasga mi corazón,
terminado con las pocas esperanzas de vencer mi temor.
Una tormenta de recuerdos invaden mis pensamientos,
mientras trato de evitarlos mis lágrimas corren por mis mejillas sin encontrar consuelo,
el viento me arrulla en su cálido seno,
pero la tormenta en mi cabeza lo transforma en hielo
hundiéndome en un limbo del que no puedo escapar.
Tranquila estoy ahora, pues los fantasmas se han ido,
pero no para siempre pues aun siguen en mi mente,
sin escapatoria me encuentro y a merced de mis recuerdos,
tratando de enfrentarlos me van consumiendo.
Nueva luz se asoma en el horizonte,
encendiendo mis esperanzas de algún día
poder abrir mis alas y encontrar el camino para volar hacia mi libertad.